viernes, 22 de octubre de 2010

28 de noviembre de 2009. 18:50 horas

Hemos decidido quedarnos un par de días. Llueve desde ayer y no nos apetecía mojarnos. No creo que vayamos a llegar tarde a nuestra cita en Hormiguera. Ya da igual, lo mismo no queda nadie con vida.

Anoche dormí por primera vez desde hace dos días. La orgía de destrucción de ayer y la guardia que hicimos ayer durante todo el día por si aparecían más vecinos de pueblo, nos ha dejado exhaustos. Esta noche hemos dormido los dos, estábamos demasiado cansados para hacer guardia. Un descuido, quizás imperdonable, pero no ha ocurrido nada. Hemos pasado el día vagueando por la planta baja de la casa y el exterior cuando escampaba. Realmente, la planta baja de la casa hiede a cadáver y pobredumbre, pero si te pones cerca de una ventana, apenas notas el olor.

Nos hemos subido al muro para ver si veíamos algún vehículo que pudiéramos utilizar. No hemos visto nada. Lo más probable, es que mañana salgamos de nuevo a la aventura. Si seguimos hacia el sur, en algún momento llegaremos a la autopista que lleva a Madrid, siguiendo ese camino llegaremos a nuestro destino.

Me queda poca batería. Parece que el ordenador no calcula todo lo bien que me gustaría la capacidad de la batería. Se acaba de encender la lucecita que indica que está a punto de agotarse.

No hemos visto movimiento alguno en lo que llevamos de día. Me parece que hoy, tampoco haremos ningún tipo de guardia. Ya mañana, si deja de llover, dejaremos este pueblo. Al final no lo hemos visto. No se si es un pueblo bonito o no. Sus gentes arden bastante bien. Es lo único que puedo decir a su favor. Si, ya se, suena irónico y macabro, pero, ¿quién me dice a mi que las normas de protocolo siguen siendo las mismas? ¿Quién me dice que lo que hace un mes se consideraba bueno o malo lo sigue siendo ahora?

Vivo en un mundo extraño, acabo de descubrir una nueva habilidad de mi querido compañero de viaje. Ha estado media hora lanzando un cuchillo que no se de dónde ha sacado contra la puerta de la cocina. Y puedo decir que ha clavado el maldito cuchillo en casi todas las ocasiones. Creo que ahora está haciéndose una especie de vaina para llevarlo. Solo falta que salga con la cara pintada de verde y negro en plan comando.

Cualquier cosa.

1 comentarios:

Punmu dijo...

Ahora queremos que sigas enga campeon.

No me haga com el Americano de Diario de supervivencia zombie y me dejes a medias con la historia.

Publicar un comentario